ESCUCHA MI ÚLTIMO EPISODIO DE PODCAST:

5 Técnicas para estar presente en tu relación de pareja

Sobre las excusas que das para no tener sexo

Seamos sinceras, hay veces que simplemente no queremos tener sexo. Puede que te haya vencido el sueño, el cansancio por tus responsabilidades diarias, o simplemente tu líbido no te está dando señales de vida en ese momento. Por otro lado, en ocasiones tenemos síntomas de alguna infección, nos ha cambiado drásticamente nuestro olor corporal o tenemos alguna incomodidad en la zona vaginal, que también puede dificultarnos el que entremos en acción.

A continuación, algunas excusas que puedes haber escuchado o utilizado cuando no quieres tener sexo:

“Me siento demasiado llena” o “comí demasiado”

Imposibilitando que tengas deseos porque te sientes inflada. ¿Qué tal si para una próxima ocasión lo intentas antes de comer?

“Estoy cansada”

La excusa más utilizada; quizás por la cantidad de responsabilidades o porque a la hora en que ves a tu pareja al final del día, genuinamente estás demasiado agotada para hacerlo. ¿Te funcionaría que te levantes un poco antes en otro momento y tomes la iniciativa?

“Siento que me voy a enfermar”

La monga, un virus o cualquier enfermedad contagiosa que ande por ahí en el momento. En esta mejor espera a recuperarte, para que puedas compartir tu energía saludable, con tu pareja.

“Tengo dolor de cabeza”

Porque obvio ¿quién quiere tener sexo si le duele la cabeza? Ahora bien, si tienes a mano algo que tomes para el dolor de cabeza, podría mejorar tu situación. Mejor aún, pídele a tu pareja que te masajee suavemente la cabeza y rostro para alivianar el estrés. ¡Quién sabe si luego te animas tanto que se te quita el dolor de cabeza!

“No me gusta hacerlo cuando estoy en regla”

Algunas no disfrutan del sexo cuando están menstruando. Otras tienen temor al reguero de sangre que esto pueda causar, y a otras les duele tanto, que ni quieren pensar en sexo. Pon toallas oscuras para que no estés preocupada por dañar tu ropa de cama o intenta disfrutarlo en la ducha. En algunos casos, cuando llegas al orgasmo durante tu período, esto pueda ayudar a que el mismo sea más corto y menos doloroso.

“Entrené demasiado fuerte hoy”

Si nunca has entrenado en el gimnasio, esto no hará sentido para ti, pero hay personas que dejan el alma haciendo ejercicios, y luego no les queda energía para más nada. Procura que descanses lo suficiente como para que el ejercicio sea un complemento de tu bienestar y no un impedimento.

“No tengo tiempo”

Si estás acostumbrada a sesiones de sexo largas y planificadas, puede que prefieras no hacer las cosas a la prisa, o quizás no te agradan los quickies. Por aburrido que pueda parecer, puede que tengas que agendar en tu calendario cuando sí tienes tiempo para ti y tu pareja.

“Me siento rarita de ahí”

Puede que tengas una infección, quizás te ha cambiado el PH drásticamente ese día y sientes que algo anda mal. Prefieres evitar, que ponerte peor. Con los años vamos conociendo nuestros cuerpos, pero si algo te da la impresión de que no anda bien, mejor salir de dudas con visitando a un médico.

Cualquiera de estas excusas que utilices tienen solución. Ya sea ir a tu ginecóloga, descansar un poco más o hacer espacio para tener el tiempo. Quizás no todas puedas solucionarlas justo antes de tener sexo, pero recuerda que deben ser excepción y no costumbre, el poner “peros”, a la hora de tener intimidad con tu pareja.

Si deseas conversar con una profesional acerca de tu vida de pareja, sexualidad o toma de decisiones, presiona aquí para comunicarme contigo.

 

Comparte este artículo

Artículos Relacionados

Leave a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Abrir chat
1
Déjanos tus preguntas con relación a productos y eventos de Laura Cruz.